Poda del aguacatero
Me gustaría saber cómo se poda este frutal y qué cuidados especiales requiere en su manejo. Agradezco su amable gestión y colaboración al respecto. Saúl E. Montiel Vásquez. Colombia
Respuesta de Jesús Villena
El aguacate se cultiva en diferentes lugares del planeta, con características climáticas y geográficas muy específicas. En estas líneas es complicado resumir poda y cuidados, por eso de momento y por razones de espacio en la sección de preguntas vamos a dar algunas pinceladas generales sobre su poda.
Esta poda suele enfocarse a marcos de plantación intensivos que nos llevan a seleccionar otras formaciones más piramidales (como podría ser el eje central), tendiendo a formar “setos”. Pero vamos a obtener mejores resultados con podas suaves o ligeras y constantes (repartidas a lo largo del año), que consiguen vigorizar la planta y regulan producciones más homogéneas con frutos de mayor calidad. Respetando la forma natural de la especie.
De manera general, en el aguacate damos los cortes dejando un pequeño tocón (de hasta 5 cm, según el diámetro de la rama a cortar). Así favorecemos la brotación, ya que en la superficie del tocón existen muchas yemas latentes.
Encontramos dos momentos fundamentales:
La poda de invierno, dirigida a establecer un equilibrio entre producción de frutos de calidad y crecimiento vegetativo del árbol. Mediante esta poda ayudamos al árbol a rejuvenecerse, a renovarse. En árboles que estén menos vigorosos adelantaremos la poda hacia finales de enero o principios de febrero, anticipándonos a la floración.
Por otro lado, la poda de verano se convierte en la poda más importante del aguacate, revelándose como fundamental en la viabilidad productiva de la finca. Se centra fundamentalmente en la poda de chupones. Mediante esta poda restamos vigor a la planta, al contrario de lo pretendido en la poda de invierno. Tendremos especial cuidado mediante los cortes en no dejar “desnudo” al árbol, quemando las ramas que queden al descubierto (la corteza del aguacate es muy sensible a la insolación).
En estas latitudes de la costa malagueña donde tengo los frutales, es importante no pasarnos de las fechas recomendadas (entre final de julio y agosto), para conseguir que los brotes que se obtengan en los cortes tengan inducción floral y, con ello, sean productivos.
Si nos encontramos con árboles que necesiten una poda más intensiva, de rejuvenecimiento, en función de nuestra observación decidiremos si hacemos una poda más drástica (cortes por la cruz) o efectuamos poda selectiva de ramas, consiguiendo una reducción de copa. Además, en las ramas que dejemos, podemos realizar posteriormente una poda de flor, a fin de aumentar la capacidad vegetativa que necesita nuestra planta.