Conservación de zanahorias para obtener semilla
He intentado obtener semilla de zanahorias, que es bienal, pero aquí los inviernos son fríos, hay helada durante varios días. En el otoño retiré las zanahorias del huerto y las guardé en arena, pero se estropearon, no sobrevivieron el invierno. ¿Cómo hacerlo bien? Patxi Lekunberri (Navarra)
Respuesta de Carmen Bastida
Posiblemente se estropearon por la humedad. La zanahoria es una verdura dura, bienal y que necesita clima frío para llegar a semilla. En la primera estación de crecimiento guarda reservas en una gruesa raíz, reservas que serán utilizadas, tras pasar el invierno, en la producción de flor y semilla. Si queremos obtener nuestra semilla algunas de esas plantas han de llegar al segundo año.
En las zonas donde la tierra no llega a helarse las plantas pueden quedar en la tierra y pasar el invierno, se las cubre con paja u otro acolchado para proteger la parte vegetal y las raíces. Pero inmovilizan parte de la parcela que no se puede aprovechar para cultivos de invierno, por lo que lo más frecuente es extraer las raíces y guardarlas.
En zonas donde la tierra se hiela en profundidad es necesario extraerlas, ya que aunque la zanahoria soporta varios grados bajo cero, si el periodo es largo, la raíz queda afectada.
Una ventaja añadida de extraerlas es que podemos hacer selección, bien por la forma, bien por la intensidad del color y tamaño, incluso por el dulzor, mordiendo al raíz y apartando las que más nos interesen, de esta manera llevaremos a semilla las raíces seleccionadas. Las raíces a conservar se limpian, se recortan las hojas, dejando intacta la corona y se separan las que presentan cortes, magulladuras o zonas que se puedan pudrir (si las hemos mordido esperaremos a que cicatrice bien la herida).
Para guardarlas se estratifican en un cajón con arena o paja, que se coloca en un lugar con temperatura y humedad lo más estable posible, por ejemplo un sótano. Si la cantidad es importante habrá que buscar un lugar con paredes y puertas aislantes, pero con algún sistema de ventilación pasiva o respiradero.
Si el lugar es frío y húmedo, la arena o paja estarán secas, y se revisarán periódicamente para evitar problemas de pudriciones. Si el lugar es muy seco se puede humedecer un poco el material de conservación para que no reseque las raíces, que inspeccionaremos alguna vez.
Con estas precauciones se pueden conservar perfectamente entre 4 y 6 meses, ya sólo nos queda volverlas a plantar y cuidarlas hasta que nos den flores y semillas.